Este artículo pretende presentar una breve guía de ejemplo para una implantación de la nueva normativa en las instalaciones de un proveedor.
Recorriendo los puntos críticos de la norma, se seguirá un caso de uso genérico para ejemplificar cómo un fabricante de vehículos puede adaptar sus procesos para cumplir con la nueva normativa de manera eficiente y eficaz.
Presentando una visión global de la norma y los procesos de producción, se pretende aportar una breve guía que sirva como punto de partida y ayude a evitar los fallos habituales en entornos industriales, cuando se tiene que hacer frente a nuevas regulaciones, encontrándose entre estos fallos la redundancia de esfuerzos, la poca eficiencia en la gestión de recursos y las deficiencias en la aplicación de medidas de seguridad.Este artículo pretende presentar una breve guía de ejemplo para una implantación de la nueva normativa en las instalaciones de un proveedor.
Recorriendo los puntos críticos de la norma, se seguirá un caso de uso genérico para ejemplificar cómo un fabricante de vehículos puede adaptar sus procesos para cumplir con la nueva normativa de manera eficiente y eficaz.
Presentando una visión global de la norma y los procesos de producción, se pretende aportar una breve guía que sirva como punto de partida y ayude a evitar los fallos habituales en entornos industriales, cuando se tiene que hacer frente a nuevas regulaciones, encontrándose entre estos fallos la redundancia de esfuerzos, la poca eficiencia en la gestión de recursos y las deficiencias en la aplicación de medidas de seguridad.
Las organizaciones se enfrentan al reto constante de adoptar nuevas estrategias de seguridad, como el modelo Zero Trust, que opera bajo la premisa de "nunca confiar, siempre verificar". Este cambio es crucial especialmente en entornos en la nube, donde la gestión de identidades y acceso a recursos es más compleja. En particular, el Secure Web Gateway (SWG) es un sistema clave, que se enfoca en controlar el acceso de los usuarios a la web, proteger contra amenazas basadas en la web y hacer cumplir las políticas de seguridad. Actúa como intermediario entre los usuarios e Internet, filtrando e inspeccionando el tráfico web para garantizar que cumple con los requisitos de seguridad de la organización.
Sin embargo, implementar y gestionar SWGs presenta desafíos significativos, como la integración con infraestructuras existentes, la gestión de la complejidad y escalabilidad. Estos desafíos requieren una atención meticulosa para garantizar una protección efectiva y eficiente en el cambiante panorama de la ciberseguridad. Este artículo explora el propósito y la función de las SWG, así como su arquitectura, su capacidad para proteger contra ciberamenazas y las mejores prácticas para su implementación.
El creciente desarrollo del malware enfocado al mundo industrial no ha parado su maquinaria ni mucho menos. Varios grupos de investigación han detectado un nuevo malware llamado Fuxnet y actualmente se encuentran investigando su alcance. Esta pieza tiene la capacidad de enviar peticiones concretas a nivel serie, por RS485/MBus, llevando a cabo inundaciones a más de 87.000 de activos, entre sistemas de control y sensores integrados que se encuentran desplegados en diferentes sectores. De entre las infraestructuras que se ven comprometidas por este malware encontramos hospitales, aeropuertos y otras infraestructuras críticas que proporcionan servicios esenciales a la población.
En el ámbito de la ciberseguridad los sistemas CASB desempeñan un papel crucial al proporcionar una capa de protección adicional para aplicaciones en la nube. Este enfoque previene amenazas, detecta malware y asegura la privacidad en un entorno digital, abordando así la creciente necesidad de protección de datos.
Este artículo explora cómo funcionan los sistemas CASB, sus aplicaciones clave y sus beneficios en términos de seguridad y privacidad, garantizando que las aplicaciones operen protegiendo datos en entornos cloud y manteniendo un control detallado sobre operaciones en la nube. Desde la evaluación de proveedores hasta la detección de comportamientos maliciosos, su versatilidad se extiende, ofreciendo beneficios como la mitigación de riesgos y una mejora de la seguridad en la nube.
El incremento de malware específicamente diseñado para ejecutar sobre sistemas que soportan procesos industriales crea una necesidad en la industria que puede cubrirse en parte con diferentes soluciones tecnológicas. Este artículo se centrará en las diferentes opciones disponibles en el mercado para poder detectar archivos maliciosos que tienen como objetivo modificar el funcionamiento de los entornos industriales o simplemente originar denegaciones de servicio.
Tanto las soluciones portables como las desplegadas por agente en los sistemas pueden ser una opción, en este artículo se verán reflejadas estas y otras opciones al igual que también se darán unas pautas de cuándo es mejor utilizar una solución u otra.
En este estudio, se expone brevemente el origen y evolución de la amenaza ransomware LockBit 3.0, a través del análisis de varias muestras maliciosa, con el objetivo de facilitar la información necesaria para poder identificar las características propias de este malware, su comportamiento y técnicas empleadas, permitiendo así una mejor identificación y respuesta ante ella.
Conocer los recursos disponibles a la hora de realizar tareas de bastionado a un sistema, nos permite optimizar el tiempo necesario para esa tarea. Además, tenemos la posibilidad de utilizar herramientas capaces de auditar el sistema indicándonos aquellas configuraciones que se consideran seguras y cuáles podrían aún ser implementadas.
El antivirus es una de las principales líneas de defensa cuando un usuario descarga un fichero malicioso o un atacante ha conseguido acceso al equipo e intenta ejecutar malware. Los ciberdelincuentes utilizan diferentes formas para evadir un antivirus, mediante distintas herramientas y técnicas en función de su tipología y funcionalidades. En este artículo se detallan las técnicas comúnmente usadas, así como las medidas de protección que debemos llevar a cabo para que los atacantes no puedan ejecutar malware en nuestros equipos.